¿Por qué Amadís sin Tiempo?
Pues Amadís porque nació fruto del amor y la esencia está en el nombre. Y sin tiempo porque Amadís nació condenado a una vida corta y peligrosa, abandonado en un río a expensas del destino. «Sin tiempo decía ella porque creía que luego sería muerto».
Y sin embargo, desde el primer momento de su existencia, desde el instante mismo de la fecundación, la vida de Amadís se convierte en una incesante aventura. Es recogido de las aguas y salvado de una muerte segura; crece hasta hacerse adolescente en la corte de un rey; se enamora de la doncella Oriana, a la que llaman la ‘sin par’; se arma caballero para hacerse digno de su amor; y sus enemigos van cayendo, uno tras otro, gigante tras enano, monstruo tras encantador,,, hasta que llenan a rebosar el cementerio de las sombras olvidadas, de las sombras sin nombre. Y ya sabes que la esencia está en el nombre.
Por eso Amadís sin Tiempo es también el Doncel del Mar y el Caballero de los Leones, porque la esencia cambia según vamos creciendo, evolucionando. Por eso Amadís sin Tiempo tiene que ser el oscuro Beltenebros, y sufrir en soledad para poder recorrer el camino que le lleve a descubrir su propia identidad, a saber quién es, a poder recibir, por fin, su último nombre: AMADÍS DE GAULA.
